16 de enero de 2025 - Jueves de la 1ª semana de los años impares
Homilía
En tiempos de Jesús, la palabra «lepra» era una expresión genérica para designar un gran número de enfermedades, sobre todo cutáneas, y sobre todo contagiosas e incurables. Debido al horror que se sentía hacia estas diversas formas de enfermedad, los afectados eran condenados al ostracismo. Se les separaba del resto del pueblo, a menudo en virtud de leyes religiosas. De este modo, la gente no sólo se protegía del contacto físico con un enfermo contagioso, sino que también se eximía psicológica y espiritualmente de mirar hacia dentro.