16 de enero de 2022 - 2º domingo "C
Is 62:1-5; 1 Cor 12:4-11; Jn 2:1-11
Homilía
El evangelista Juan es un místico y un teólogo. En el relato que acabamos de escuchar, no debemos ver la simple descripción de un milagro simpático, por el que Jesús proporciona a los invitados el vino que necesitan para continuar el festín, quizá porque sus discípulos han contribuido en gran medida a agotar las reservas. La clave del relato se encuentra, como es habitual en Juan, al final de la narración: Este, dice Juan, fue el primero de los signos realizados por Jesús; y este signo nos da la clave para la interpretación del resto del Evangelio. En efecto, se trata de una " signo ", que es muy diferente de un " milagro ".