Homilías de Dom Armand Veilleux en español.

15 de septiembre de 2021 - Nuestra Señora de los Dolores

1 Cor 10:14-22; Juan 19:25-27

Homilía

          Ayer celebramos el misterio de la Exaltación de la Cruz Gloriosa.  Hoy celebramos a María de pie, llena de dolor -dolor de madre- junto a esa Cruz donde muere su Hijo.

14 de septiembre de 2021 - Fiesta de la Cruz Gloriosa

Num 21,4-9; Fil 2,6-11; Jn 3,13-17

Homilía

            Nuestros misales suelen llamar a la fiesta de hoy "Fiesta de la Cruz Gloriosa".  Esta es sin duda una expresión muy hermosa, pero el nombre tradicional de esta fiesta, que es una traducción literal del nombre griego, es la "Fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz".  La palabra "exaltación" es admirablemente ambigua.  Puede referirse al movimiento de levantar la cruz en la que se encuentra un condenado (en el acto mismo de la crucifixión), o puede referirse al movimiento de levantar la cruz en alto en triunfo y gloria.

5 de septiembre de 2021 -- 23º domingo "B

Is 35:4-7a; St 2:1-5; Mc 7:31-37

Homilía

            Los Evangelios rara vez nos muestran a Jesús fuera del territorio de Israel. En el pasaje inmediatamente anterior al que acabamos de leer, en el Evangelio de Marcos, Jesús había ido a la región de Tiro, al norte del lago de Galilea. Era una región fronteriza, con una población mixta, en su mayoría de religión pagana. Allí había curado a la hija de la mujer sirofenicia. Y al principio del texto de hoy, le vemos salir de Tiro, pasar por Sidón, hacia el lago de Galilea e ir directamente a tierra pagana, a la federación de diez ciudades llamada la Decápolis.

12 de septiembre de 2021 -- 24º domingo "B

Is 50,5-9a; St 2,14-18; Mc 8,27-35

Homilía

          Esta es la época del año en la que el tiempo cambia.  A veces parece verano; otras veces es casi invierno.  Las hojas de los árboles han empezado a caer.  No hay duda; sabemos que pronto será decididamente otoño.

4 de septiembre de 2021 -- Sábado de la 22ª semana del tiempo ordinario

Col 1:21-23; Lc 6:1-5

Homilía

           Como en muchos otros casos, es de nuevo hoy la última frase de la lectura del Evangelio la que da sentido al texto que hemos leído: "El Hijo del Hombre es el Señor del sábado".  Con estas palabras, Jesús nos revela el sentido último de la ley, de toda ley. 

8 de septiembre de 2021

Fiesta de la Natividad de María,

Miqueas 5:1-4a; Mt 1:1-16. 18-23

Homilía

          Los Evangelios son muy discretos sobre la Virgen María. Cada vez que se la menciona es para mostrar su lugar y su papel en las principales etapas del misterio de la salvación.  Ella está allí el día de la Anunciación para pronunciar su "Sí" y recibir en su seno al Hijo del Padre Eterno. Estará presente en varias etapas de la vida pública de su Hijo y especialmente junto a la Cruz y con los Apóstoles el día de Pentecostés.

3 de septiembre de 2021 - Viernes de la 22ª semana del tiempo ordinario

Col 1- 15-20; Lc 5, 33-39

Homilía

           En la primera lectura, tomada de la Carta a los Colosenses, Pablo nos ofrece un himno cristológico que consta de dos estrofas, una relativa a la creación y otra a la redención.  En el primero, Cristo es presentado como el primogénito de la creación, antes que todas las criaturas; en el segundo, es presentado como el primogénito de entre los muertos, el primogénito de una multitud de hermanos y hermanas, todos ellos primogénitos, nacidos a una nueva vida en las aguas del bautismo.

           Puesto que todavía estamos en los primeros capítulos de la lectura del Evangelio de Lucas, quizá sea legítimo señalar que este himno cristológico nos permite entender un pasaje del primer capítulo de Lucas, en el que se dice que durante el viaje de María a Belén de Judá para el censo, se le cumplió el tiempo y dio a luz a su hijo, el primogénito (o prototokos).

           Es erróneo traducir, como se hace a menudo, "dio a luz a su primogénito".   En griego, como en hebreo, cuando se habla del primogénito, en relación con la madre, se utiliza una expresión que significa "el que abre el útero"; en cuanto al sustantivo "prototokos", designa siempre al primogénito en relación con el padre.  Una traducción exacta del griego en este primer capítulo de Lucas debe ser, por tanto: "Ella (María) dio a luz a su hijo, el Primogénito", es decir, el Primogénito del Padre eterno, según el título de Cristo que acabamos de leer en el himno cristológico de la carta a los Colosenses. 

           Jesús, el hijo de María, es, por tanto, el Primogénito de toda criatura, aquel del que toda la creación es sólo un débil reflejo.  Él es también el Primogénito de entre los muertos, el primero de los muchos hermanos que resucitarán de entre los muertos, revelándonos la gloria a la que también nosotros estamos llamados.

           Este Primogénito es también el Esposo del que habla el Evangelio de hoy.  Desde la Resurrección hasta la Parusía, este Esposo nos ha sido arrebatado; este es el tiempo en el que tiene sentido ayunar y hacer penitencia, esperando la plena manifestación del Primogénito y su Padre en la Luz del Espíritu.

(Hoy recordamos a San Gregorio Magno)