31 de enero de 2024 - Miércoles de la 4ª semana ordinaria
2 S 24, 22.0-17; Marcos 6, 1-6
Homilía
La ley judía de la época de Jesús permitía a cualquier varón adulto leer las Escrituras en la sinagoga y añadir algunas palabras de comentario. Nadie en Nazaret negó a Jesús este derecho. Su problema es que Jesús, durante los primeros treinta años de su vida aproximadamente, fue un aldeano como cualquier otro. Por eso, cuando empieza a pronunciar palabras sabias y a realizar curaciones, le preguntan: "¿De dónde ha salido esto? ¿Qué es esta sabiduría que le ha sido dada, y estos grandes milagros que son realizados por sus manos? ¿De dónde saca ese poder? Le conocemos, es uno de los nuestros. Es el hijo del carpintero. Conocemos a todos los miembros de su familia que aún viven entre nosotros. - Al no tener el valor de deducir conclusiones de los hechos que observan, rechazan estos hechos y todo lo que Jesús ha realizado entre ellos.