La génesis de Las constituciones de la ocso (1967-1990) (Por dom Armand Veilleux)
Las constituciones de una orden religiosa no son simplemente un texto jurídico que regula su funcionamiento interno y su relación con los demás órganos de la institución eclesial. son un texto en el que una orden expresa la percepción que tiene de su identidad espiritual y de su misión. al aprobarlas, la santa sede con-fiere un reconocimiento eclesial a la forma de vida cristiana vivida en el seno de 11 dom armand veilleux es abad de scourmont desde 1999, después de haber sido abad de mistassini (canadá) de 1969 a 1976, de conyers (USA) de 1984 a 1990, procurador de la orden de 1990 a 1998.•••
101Capítulo VIII: La evolución de las estructuras de la Ordental orden o de tal instituto. La génesis de un texto así puede ser tan importante como el texto mismo. La manera como nuestra orden ha elaborado sus constituciones de 1965 a 1990 es un caso muy excepcional de participación del conjunto de los miembros de una orden en la elaboración de un texto que expresa su carisma propio. vale, pues, la pena contar dicha historia. Y para destacar los caracteres propios de tal empresa no vendrá mal decir algunas palabras de su prehistoria. 8.5.1. Las Constituciones de 1893 y de 1925en el « capítulo de unión» de 1892, en el curso del cual las tres principales con-gregaciones surgidas de La trapa decidieron no sólo unirse en un solo cuerpo, sino constituirse como orden monástica autónoma, se decidió igualmente redac-tar unas constituciones. Fueron puestas a punto al año siguiente en el capítulo General de 1893 tenido en sept-Fons, y fueron aprobadas por la santa sede el 25 de agosto de 1894. el plan de dichas constituciones es del todo revelador de la eclesiología del momento. La primera parte trata del gobierno de la orden: capí-tulo General, abad General, definidores, padres inmediatos, abad o prior titu-lar, etc... La segunda parte trata de las observancias y finalmente la tercera de la entrada en la orden. nuestras constituciones de 1990 darán vuelta a la pirámide como lo había hecho el vaticano II en la constitución Lumen Gentium sobre la iglesia.sea como sea, esta decisión de los capitulares de 1892 de redactar inmediata-mente unas constituciones tuvo una importancia capital para la evolución sub-siguiente de la orden. dichas constituciones dieron a la orden un sentido claro y fuerte de su identidad; ello le permitió pasar sin demasiada dificultad a través de la crisis de las dos guerras mundiales y lanzarse con gran energía a un vasto programa de fundaciones en los cuatro rincones del mundo. esta clara identidad permitió también a la orden transformarse, de una orden esencialmente europea y mayoritariamente francesa, en una orden internacional y multicultural, sin per-der su identidad espiritual. después de la publicación del derecho canónico de 1917, nuestra orden se puso inmediatamente a trabajar en la revisión de sus constituciones. esta nue-va versión, preparada en los capítulos Generales reunidos en cîteaux en 1920 y 1921 – primeros capítulos Generales después de la primera Guerra mundial – fue aprobada por la santa sede en 1925. en cuanto a las constituciones de las monjas, que habían quedado afectadas por la unión de las congregaciones en 1892, fueron también revisadas después de la publicación del derecho canónico y recibieron la aprobación de Roma en 1926.