12 de noviembre de 2023 - 32º domingo "A"
Sab 6,12-16; 1 Tes 4,13-18; Mt 25,1-13
HOMILÍA
En estos últimos domingos del año litúrgico, las lecturas evangélicas llaman cada vez más nuestra atención sobre el regreso de Cristo y, por tanto, también sobre el momento del encuentro final con el Creador, que para cada uno de nosotros será el momento de nuestra muerte. Sin embargo, la preocupación principal de todos estos textos no es "la vida después de la muerte", sino cómo nos habremos preparado para este encuentro mediante la calidad de nuestra vida aquí abajo. Este es el sentido de la última frase del Evangelio que acabamos de leer: "Velad, pues, porque no sabéis ni el día ni la hora". "Velar" no significa aquí esperar pasivamente, sino vivir con los ojos abiertos y atentos. Aunque esta breve frase parezca salida de la nada, es la conclusión lógica de la narración precedente.